Título original: Murder on the Orient Express
CASOS DE POIROT Nº 10
Autor: Agatha Christie
Género: misterio, thriller, detectives,
Páginas: 208
Editorial: Molino
Fecha de publicación original:1934
Sinopsis:
El famoso detective belga Hércules Poirot, al regreso de una misión, coincide con una curiosa pareja a la que, tras escuchar accidentalmente un comentario, despertará su atención. Con posterioridad a este suceso, vuelve a coincidir con ellos en el Orient Express, tren que se encuentra inusualmente lleno para esa época del año. Durante la segunda noche de viaje tiene lugar una serie de curiosos y llamativos incidentes. A la mañana siguiente se descubre que uno de los pasajeros ha sido asesinado a lo largo de la noche y Poirot debe resolver el crimen.
Opinión:
En esta novela se plantea un improbable caso en el que un pasajero es asesinado a bordo del Orient Express en el que la víctima es asesinada en un vagón en el que viajan 12 pasajeros más además del detective encargado de resolver el misterio.
El detective, junto con el médico y el propietario de la compañía deben resolver un caso en el que a priori no existe nada claro que revele el motivo que ha llevado a dicho asesinato: todas las peronas que ocupan dicho vagón no tienen ningún tipo de relación entre sí ni con la víctima, excluyendo al secretario y al criado que trabajan para el muerto y cuentan con variadas nacionalidades y profesiones. Las lesiones que presenta la víctima no concuerdan con un único asesino, al igual que parecen las cartas amenazadoras que se descubren. No resulta clara la determinación de la hora del crimen o si el asesino es uno de los pasajeros o ha subido y bajado del tren previo a la nevada. Además, cada uno de los viajeros cuenta con una solida coartada prestada por los demás viajeros.
Poirot vuelve a demostrar que es el mejor detective y que le basta su raciocinio y el estudio del comportamiento humano para descubrir sin excesiva dificultad un caso que parece no tener solución y que tiene muy confundidos a su amigo el accionista de la compañía y al doctor.
Tengo que decir que no soy demasiado entusiasta de la figura de Poirot, pese a ser uno de los grandes detectives de la novela de misterio, aunque sí me gustan las tramas y los misterios que debe resolver. Sin embargo, no puedo evitar que en muchas de las novelas su carácter tan prepontente y pagado de sí mismo haga que me cueste empatizar con él y que no me cueste entrar en la novela.
Sin embargo, eso no me sucede en esta novela. Es una de mis favoritas de este detective, quizá por el modo diferente en el que está estructurada o narrada, y las muestras propias del carácter de Poirot no me resulta molesta sino que me parece hasta divertida.
La trama en sí me ha gustado mucho: me parece que está muy bien presentado el misterio, la dificultad para poder averiguar la verdad, el modo en que todo el mundo tiene algo más dentro de lo que pueda parecer a simple vista, la conjugación de los personajes tan plurales y diferentes entre sí y característicos de la época en la que fue escrita, la visión que las personas tienen de las otras por cosas tan nimias como por tener una nacionalidad diferente de la propia o la reacción de los pasajeros al crimen y al probable motivo del mismo.
Creo que una vez más Agatha Christie vuelve a conseguir una novela de misterio redonda en la que en una novela no muy larga no sientes que sobre ni que falte nada, que es entretenída, amena y muy fácil de leer que te mantiene pegada a la novela intentando averiguar la autoría del crimen.
Sí que es verdad que algunos de los motivos o secretos de los pasajeros del tren pueden averiguarse con relativa facilidad pero el caso cuenta con más de un secreto bastante sorprendente en el que hace que vuelvas a admirar las dotes del hombrecillo del bigote belga.
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